En las empresas de servicios, y en nuestro ámbito TIC en particular, el Talento de las Personas que forman nuestra Organización es un factor diferenciador clave. Es fundamental tanto en la definición de la Estrategia como en el ámbito de la Gestión, pero quizás lo es más en la relación con nuestros Clientes, tanto en el ámbito Comercial como en la prestación de los Servicios.
Nuestros clientes son la razón de nuestra existencia. Como empresa de servicios, nuestro foco de atención está en satisfacer las necesidades que ellos nos plantean y en hacerlo por encima de sus expectativas. Y eso lo llevamos a cabo a través de Personas, englobadas a veces bajo el término de Recursos Técnicos.
Y ¿qué entendemos por Talento? El diccionario de la RAE nos da cuatro definiciones:
1. inteligencia (capacidad de entender).
2. aptitud (capacidad para el desempeño o ejercicio de una ocupación).
3. Persona inteligente o apta para determinada ocupación.
4. Moneda de cuenta de los griegos y de los romanos.
Las tres primeras, conjuntamente, definen lo que20 buscamos en las Personas para llevar a cabo una excelente prestación de los servicios en nuestros Clientes, pero complementadas con otra característica fundamental: la actitud, o “Disposición de ánimo manifestada de algún modo” también según la RAE.
La cuarta acepción también es importante, porque el Talento se traduce en Dinero, y el objetivo de las empresas (también la nuestra) es ganar dinero.
Y el Talento de las Personas, ¿lo desarrollamos o lo compramos? Volveremos sobre este tema…
Moisés Gil, Coordinador de Recursos Técnicos Grupo de Desarrollo de Aplicaciones de Inycom
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